Un entorno de trabajo cambiante: el negocio es algo personal

Este artículo, escrito por Ashley Goldsmith, apareció originalmente en inglés en el blog de Workday. Pensamos que también sería de interés para los lectores hispanohablantes, por lo que lo ofrecemos traducido a continuación.

Con un panorama laboral que sigue evolucionando, cuando pienso en el año que viene, para mí lo más relevante es que la voz individual sigue ganando fuerza en el entorno de trabajo, lo que tal vez se deba a que los aspectos personales de nuestras vidas cada vez están más ligados a los laborales, y a las circunstancias en las que operamos hoy día.

Las personas son el recurso más valioso de las empresas y, dada la escasez de talento en el mercado, estas tienen una mayor responsabilidad para crear una cultura en la que los empleados tengan experiencias significativas y den lo mejor de sí mismos en el trabajo. Los responsables empresariales, especialmente los CHRO, están descubriendo por qué es tan importante: favorece a los empleados y favorece al negocio.

Una experiencia positiva puede influir en el nivel de confianza de los empleados y, en última instancia, contribuir a un mejor desempeño y una mejor retención. Esto a su vez tiene un efecto en la experiencia del cliente y ayuda a mejorar los resultados de una empresa. Un enfoque centrado en ciertas áreas concretas, entre ellas la diversidad, la digitalización y una cultura que dé prioridad a los empleados, puede ayudar a la empresa a afrontar en todo momento la situación de los empleados a medida que cambian sus necesidades.

Diversidad significa diferencia

Desde nuestros comienzos, en Workday nos centramos en las diversidad, pero dada la problemática social del mundo actual nos hemos estado replanteando lo que el término significa para nosotros, y lo hemos ampliado. Desde nuestro punto de vista, lo que realmente significa es diferencia.

Carin Taylor, nuestra responsable de diversidad, explica que es una mezcla de atributos característicos que todos tenemos, incluidas nuestras diferencias de extracción social, perspectiva, raza, género, orientación sexual, capacidad física, nacionalidad, ubicación, función, etc. Procuramos ampliar nuestro concepto de diversidad y entender que las cuestiones de diversidad con las que nos enfrentamos en San Francisco podrían no ser las mismas en otras partes del mundo.

Para llevar a la práctica nuestros objetivos dimos un paso más en nuestro programa de integración y diversidad y creamos un concepto que engloba el valor, la inclusión, la integración y la equidad (VIBE, por sus siglas en inglés). Este año le vamos a celebrar una semana VIBE en junio: cinco días de concienciación en toda la empresa para continuar nuestra misión de crear una cultura de integración e inclusión.

Seguimos utilizando los datos suministrados por los empleados de todo el mundo en nuestras encuestas semanales para entender sus opiniones y este año nos estamos centrando más en estudiar las tendencias de diversidad. Analizamos los datos para averiguar si la experiencia de nuestros empleados es similar, sea cual sea su sexo, raza, edad, ubicación geográfica, años de empleo en Workday, etc. Esto nos permite formular nuevos planteamientos sobre la diversidad, y así descubriremos dónde estamos a la altura de las expectativas y dónde podemos mejorar.

Los imperativos de la digitalización

Los cambios en la naturaleza del trabajo, las nuevas tecnologías y las necesidades de las nuevas generaciones están llevando a digitalizar las funciones de RRHH, algo que las empresas deben adoptar para crear prácticas modernas. Aunque estos cambios suelen venir acompañados de incertidumbre, RRHH está en un momento increíblemente estimulante. Podemos ayudar a las empresas a asumir estos cambios, a determinar qué deben automatizar para mejorar las muchas tareas que son innatamente humanas, y a liberar tiempo que los equipos podrán dedicar a actividades tan importantes cómo decidir el enfoque de una estrategia concreta.

La posibilidad de que el software empresarial ofrezca una experiencia de usuario similar a la que ofrece el software de consumo es otro aspecto de la digitalización que es una parte fundamental del ADN de Workday. En nuestra vida personal, muchos usamos Alexa, Google y Siri, tecnologías innovadoras que son divertidas y fáciles de usar. Cuando utilizo herramientas digitales en el trabajo, quiero que tengan esos mismos atributos y sé que los empleados opinan igual que yo. Ante todo nos centramos en la movilidad y queremos que las experiencias digitales de los empleados sean parecidas a sus experiencias como usuarios de consumo.

Analizamos los datos para averiguar si la experiencia de nuestros empleados es similar, sea cual sea su sexo, raza, edad, ubicación geográfica, años de empleo en Workday, etc.

Este año hemos ofrecido una inscripción abierta para Workday Benefits en teléfonos móviles. Si alguien no conseguía completar el proceso en un dispositivo, podía finalizarlo en otro. También aplicamos un enfoque de consumo al aprendizaje, con material interactivo y contenido generado por los propios empleados, disponible bajo demanda y en una misma ubicación, con funciones similares a las que vemos como consumidores, entre ellas la posibilidad de recomendar vídeos, crear listas de reproducción y añadir links.

Las personas son lo primero

Según un estudio de Accenture, "Hay un paralelismo sorprendente entre una experiencia de cliente superior y una experiencia de empleado. Una experiencia de cliente optimizada genera lealtad y ventas adicionales. Una experiencia de empleado estelar atrae al talento y fomenta la implicación, la productividad y la retención de la plantilla. A su vez, eso mejora directamente el rendimiento financiero de una empresa". En pocas palabras: los empleados satisfechos conllevan clientes satisfechos; por eso en Workday los empleados son lo primero.

En un artículo de blog del otoño pasado destaqué una serie de programas y actividades que nos ayudan a crear experiencias de empleado significativas, desde apoyar una carrera ágil a facilitar el bienestar. Los empleados y los colaboradores individuales son quienes trabajan en primera línea y merecen tener buenos mánagers; para ello invertimos en nuestros responsables de personal y les ofrecemos varias sesiones de formación a lo largo del año. A mí lo que más me gusta son los dos días de la "People Leadership Summit", un evento que celebramos en San Francisco y al que acuden nuevos responsables de Workday de todo el mundo para oír a nuestros directivos hablar sobre nuestra cultura y lo que significa ser un responsable de personal en Workday. Del mismo modo que no esperamos que el personal de atención al cliente sepa cómo afrontar los retos que plantea el servicio al cliente sin formación previa, las oportunidades de formación anuales son una forma de invertir en nuestros empleados, que se merecen un apoyo firme y continuo y la ayuda necesaria para desarrollar sus habilidades.

El coeficiente de la satisfacción

Los empleados satisfechos aportan otra ventaja: la satisfacción es importante para la productividad. Durante años los estudios han demostrado que cuanto más contentos están y más realizados se sienten nuestros equipos, más productivos son. Y, al igual que el feedback de los clientes nos guía a la hora de crear nuevas funciones y mejoras en los productos, el feedback de nuestros empleados nos ayuda a estructurar programas y experiencias para el personal que permitirán cultivar una actitud positiva.

Los empleados y el servicio al cliente son dos de nuestros valores fundamentales en Workday y me honra que hace poco la revista Fortune nos colocara en el puesto número 4 en su lista "100 Best Companies to Work For" y en el número 2 en su lista de 2019 "50 Best Workplaces in Technology", y que nuestro índice de satisfacción del cliente actual sea del 98 %. Existe una estrecha relación entre estas dos áreas y, cuando aplicamos los mismos principios a ambas experiencias, vemos resultados positivos.

Pero aún más importante es que, como mucho de lo que hacemos en Workday, crear experiencias de empleado significativas no es lo correcto únicamente por su valor de negocio: es lo correcto simplemente porque es lo que se debe hacer. Seguiremos innovando de forma ética, facilitando y haciendo más productiva la vida laboral de las personas y dando prioridad a los empleados, y espero seguir compartiendo más información sobre nuestro recorrido.